Policiales
Controlaron un intento de motín en el Penal de Roca
Debido a cambios en el régimen de visitas tras el supuesto abuso sexual ocurrido dentro del establecimiento, internos de los Pabellones 3 y 4 iniciaron una quema de colchones que pudo ser controlado.

Tras los cambios ocurridos en el régimen de visitas luego de la denuncia por abuso sexual, ayer por la tarde internos de los Pabellones 3 y 4 quemaron colchones y protagonizaron un intento de motín que pudo ser controlado. Así lo informó el juez de Ejecución Penal, Juan Pablo Chirinos, en diálogo con Ahí Vamos (de lunes a viernes de 7 a 9 por La Super FM 96.3).
La protesta motivó que efectivos del Servicio Penitenciario Provincial ingresaran a los Pabellones y arrojaran gases, con la idea de llegar a los principios de incendio originados y así poder apagarlos.
«El motivo de la medida de fuerza de los internos fue por el cambio en el régimen de visitas que determinaron las autoridades penitenciarias, ya que ahora no se permitirá más el ingreso de amigos y familiares de los detenidos a las celdas de los internos», indicó Chirinos.
El principio de motín ocurrió cerca de las 19.30 horas, cuando algunos internos tomaron la reja de acceso del Pabellón 3. Ahí comenzó el fuego en algunos sectores y la consiguiente respuesta por parte de los celadores. Eso motivó la llegada hasta el lugar el juez Chirinos, que logró controlar la situación.
«Es probable que algún interno inicie alguna medida de fuerza drástica como huelga de hambre», lamentó finalmente Chirinos.
Policiales
Una operadora del 911 guió a un papá y salvó a su bebé
El hecho ocurrió a primera hora de la noche en Stefenelli.

Una intervención guiada por operadores del 911 RN Emergencias permitió salvar la vida de un bebé en General Roca. El padre del pequeño llamó desesperado a la línea gratuita porque su hijo no respiraba; gracias a la actuación serena, técnica y sostenida de la operadora de turno, el niño recuperó la respiración mientras era trasladado hacia el hospital local.
A primera hora de la noche, la central recibió el llamado de un vecino de Stefenelli. Del otro lado de la línea, un hombre apenas podía explicar lo que ocurría: su bebé estaba ahogado, sin responder y con signos de estar perdiendo el aire.
En ese clima de angustia extrema, la operadora activó inmediatamente el protocolo de asistencia telefónica para emergencias pediátricas, manteniendo la calma pese a la tensión que atravesaba a quien pedía ayuda.
Luego, mientras el padre intentaba llegar por sus propios medios al Sanatorio Juan XXIII, la operadora comenzó a dar instrucciones precisas para realizar la maniobra de desobstrucción de vías respiratorias en lactantes. Con un tono firme pero contenedor, logró que el hombre siguiera cada paso, incluso cuando los nervios le dificultaban responder con claridad. Esa guía fue clave para sostener el control de la situación.
A continuación, cuando la desesperación parecía ganar terreno, el momento más crítico, de repente el sonido del llanto del bebé irrumpió a través del teléfono.
La operadora permaneció en línea, acompañando cada movimiento y verificando que la respiración se mantuviera estable hasta el ingreso al centro de salud. Recién entonces, con el menor en manos del equipo médico, la comunicación pudo cerrarse.
«Este episodio volvió a poner de relieve la importancia del entrenamiento constante de los operadores del 911 RN Emergencias. Cada procedimiento, cada simulación y cada actualización técnica están pensados para que, en situaciones límite donde cada segundo pesa, el personal pueda actuar con templanza y eficacia», destacaron desde el Ministerio de Seguridad y Justicia de Río Negro.
Policiales
Un Fiat Duna quedó retenido en Roca tras detectar anomalías en su identificación
El Cuerpo de Seguridad Vial interceptó al rodado por circular sin capó y descubrió inconsistencia entre la documentación y los números identificatorios.

Personal del Cuerpo de Seguridad Vial de General Roca secuestró un automóvil durante un control vehicular realizado sobre la Ruta Nacional N° 22, a la altura del kilómetro 1180. El procedimiento se llevó a cabo por la noche, cuando los efectivos detuvieron la marcha de un Fiat Duna rojo que circulaba en sentido este-oeste y que llamaba la atención por transitar sin capó.
Al solicitar la identificación del conductor, los policías recibieron la cédula del vehículo, aunque la verificación posterior despertó sospechas. El número de motor no coincidía con el especificado en la documentación presentada. Además, los uniformados advirtieron que la numeración tenía restos de pintura roja, lo que dificultaba su lectura y sugería una posible manipulación.
La situación se agravó cuando el personal de Seguridad Vial no logró encontrar el número de chasis en el lugar donde debería estar grabado. La ausencia de esta identificación reforzó las presunciones de que el vehículo podía tener adulteraciones o irregularidades estructurales.
Ante estas anomalías, el auto fue trasladado a la dependencia policial para continuar con las diligencias.
La Fiscalía N° 1 dispuso el secuestro del rodado y el inicio de actuaciones por infracción al artículo 289 del Código Penal, que contempla delitos vinculados con la alteración de numeración o documentación identificatoria de vehículos.
La causa continuará su curso mientras se realizan las pericias necesarias para determinar el origen del automóvil y establecer eventuales responsabilidades penales.
Policiales
Cayó un sujeto buscado por la Justicia: lo atraparon luego de saltar techos y muros
La Policía lo encontró tendido en la calle y, al intentar identificarlo, escapó. Fue retenido tras una intensa persecución por varias cuadras.

Efectivos de la Subcomisaría 69° de General Roca detuvieron a un joven que tenía un pedido de captura vigente emitido por la Fiscalía Descentralizada de Allen.
El operativo comenzó cuando el personal policial realizaba tareas de prevención en la zona norte y, al llegar a la intersección de Gavilán e Islas Orcadas, advirtió la presencia de un hombre tendido en la vía pública. Cuando los uniformados se acercaron para identificarlo, el joven se incorporó de manera repentina y escapó corriendo.
A partir de ese momento se inició una persecución por calle Gavilán hacia el este. Pese a las reiteradas órdenes de alto, el sospechoso continuó su huida, saltando paredones e ingresando por los techos de varias viviendas.
En uno de los domicilios, el propietario alertó a los policías de que el individuo se desplazaba sobre su techo, lo que permitió a las patrullas acotar la búsqueda.
Finalmente, el joven fue interceptado y reducido sobre calle 3 de Febrero. Presentaba lesiones en el rostro, aunque declaró que no deseaba recibir atención médica ni iniciar acciones legales por ese motivo.
Tras ser identificado, se confirmó que registraba un pedido de captura activo en una causa judicial iniciada en Allen. La Fiscalía en turno dispuso su detención y el inicio de nuevas medidas procesales.





