Roca
Roca: Aguas Rionegrinas inició la obra para mejorar el servicio de agua en Alta Barda
Se estima que mejorará la calidad de vida de más de 7.000 habitantes.

Tras el compromiso asumido el pasado domingo (01/09) en el marco del 145° aniversario de General Roca, por parte del gobierno provincial, Aguas Rionegrinas (ARSA) comenzó la obra destinada a mejorar la prestación del servicio de agua potable a los vecinos de Alta Barda.
Los trabajos a cargo de personal de ARSA, consisten en la ejecución de una cañería de agua potable, que contempla la ejecución de un nudo de empalme a cañería de PVC 200 existente, ubicada en intersección de calle Las Petunias y Felix Heredia, uniendo la calle Los Ceibos a las calles de Las Petunias con Los Jazmines.
Se estima que, gracias a esta obra que arrancó el lunes posterior al anuncio del gobierno provincial, mejorará la calidad de vida de más de 7.000 habitantes.
El gerente general de Aguas Rionegrinas, Javier Iud, dijo que «es una obra importante, que se realiza por administración, es decir, la está haciendo el propio personal de nuestra empresa en colaboración con el Departamento Provincial de Aguas. Esto nos permite disminuir muchísimo los costos porque lo hacemos directamente nosotros y tenemos expectativas de que este nuevo acueducto va a permitir un mejoramiento muy importante en la calidad del servicio de agua».
Además, se llevará adelante otra obra en la calle Maipú, en donde se realizará la refuncionalización de los filtros rápidos que permitirá ampliar un 20% la capacidad de los filtros ubicados a la vera del Canal Principal de Riego. «Esto tiene un efecto directo a la zona alta de la localidad. Estamos hablando de una población de 30.000 habitantes que deberían recibir, a partir de esta refuncionalización, un 20% más de agua para esta temporada», explicó Iud, y confirmó que el inicio se prevé para antes de la temporada de verano.
Otra de los trabajos que será clave es en Fiske Menuco. Consiste en la ejecución de la red de agua potable y la construcción de una cisterna con equipo de presurización, para la zona alta del barrio.
Actualmente se encuentra en su tercera etapa, y al respecto, Iud expresó que debido al «cese de financiamiento nacional, el gobernador Alberto Weretilneck le ha propuesto al Municipio General Roca, que la Provincia se haga cargo del costo de la finalización de la obra. Muy probablemente esto va a ser definido en los próximos días». Actualmente los trabajos están en un 50%.
Judiciales
Juicio por la muerte de Valentín Mercado: Fuertes acusaciones contra el anestesista
Los fiscales aseguraron que Mauricio Atencio Krausse se distrajo, salió de la sala y no monitoreó al paciente. El defensor negó negligencia y atribuyó el episodio a un coágulo. La sentencia se leerá el 3 de diciembre.

Luego de escuchar a 14 testigos durante tres días de debate, el Ministerio Público Fiscal y la querella solicitaron que el juez unipersonal declare penalmente responsable al anestesiólogo Mauricio Atencio Krausse, imputado por el delito de homicidio culposo por la muerte de Valentín Mercado Toledo. En contrapartida, la defensa requirió el sobreseimiento. La sentencia se conocerá el 3 de diciembre a las 12:30.
El fiscal del caso sostuvo que «hemos acreditado la teoría del caso planteada: demostramos que el hecho ocurrió cuando el niño ingresó vivo a la sala de cirugía y jamás volvió a estar consciente, producto de la impericia y negligencia del profesional imputado«.
A lo largo del debate quedó acreditado que la operación no era de alta complejidad, ,tal como explicaron tanto el cirujano como la médica de terapia intensiva pediátrica. Además, la familia había firmado un contrato con Atencio Krausse, en el que éste garantizaba su presencia durante todo el procedimiento.
El Ministerio Público señaló que fue el anestesiólogo quien autorizó el inicio del acto quirúrgico, tras realizar los chequeos correspondientes. Los testigos coincidieron en que la máquina de monitoreo funcionaba correctamente y que continuó en uso incluso después de la cirugía. También afirmaron que nadie obstruyó el equipo y que su control estaba exclusivamente a cargo del médico imputado.
Según la fiscalía, Atencio Krausse no sólo debía vigilar el monitor, sino también observar al paciente. Sin embargo, testigos indicaron que salió dos veces de la sala -para hablar por teléfono y para buscar un cargador- y que en otros momentos se lo vio mirando su celular durante la intervención.
La situación se agravó cuando las instrumentadoras advirtieron signos de cianosis. Ante ello, Atencio Krausse convocó a colegas anestesistas, quienes constataron que el niño estaba en paro. Se aplicaron maniobras de reanimación y adrenalina, lo que logró reactivar su sistema cardiovascular. Luego se descubrió que un coágulo obstruía la punta del tubo traqueal, el cual fue reemplazado.
La fiscalía subrayó que el monitor se había desconectado hacia el final de la cirugía y que fue un enfermero quien lo reconectó, momento en que comenzó a mostrar los valores reales del niño. «Fue un error humano, no de la máquina», remarcaron.
Respecto del daño causado, el fiscal afirmó que el niño sufrió un daño intenso e irreversible desde el inicio del paro. También destacó lo expuesto por la psicóloga de OFAVI: la familia padeció una «estafa emocional», ya que no se les brindó información clara durante los días posteriores.
La querella sostuvo que la muerte fue «el resultado directo de una conducta negligente” y que el imputado “incumplió estándares básicos de su especialidad, omitiendo controles indispensables en un contexto donde la vida de Valentín dependía de él».
Por su parte, la defensa argumentó que no hubo desatención por parte de Atencio Krausse y que la hipoxia se produjo por la obstrucción abrupta del tubo traqueal, desligando responsabilidad del anestesista respecto de la taquicardia generada por la adrenalina.
El Tribunal Unipersonal dará a conocer la sentencia el miércoles 3 de diciembre a las 12.30.
Policiales
Rápido accionar policial recuperó elementos robados de una vivienda
La Brigada Motorizada actuó en minutos tras la denuncia de un vecino que vio a dos sujetos manipulando la puerta de una casa.

La rápida intervención de la Brigada Motorizada de Apoyo (BMA) permitió frustrar un intento de robo a una vivienda ubicada en la zona de Córdoba y San Luis, en General Roca, luego de que un vecino alertara que dos individuos intentaban forzar una puerta.
El aviso fue recibido por un agente de la BMA que patrullaba la zona del Canalito, lo que permitió desplegar un rastrillaje inmediato. Los sospechosos fueron localizados en Chacabuco y San Luis, donde fueron identificados.
Entre sus pertenencias se encontraron cerraduras y herramientas, elementos que generaron sospechas sobre su vinculación con el hecho. Minutos después, se constató que en una vivienda de Córdoba al 2000 faltaban justamente cerraduras, lo que terminó de relacionar a los individuos con el intento de robo.
Ambos quedaron aprehendidos y a disposición de la Justicia.
Judiciales
Deberá indemnizar a una mujer que chocó contra la puerta de su auto mal abierta
El Tribunal rechazó los argumentos de la aseguradora, que buscó responsabilizar a la motociclista y negó la cobertura del hecho.

Una motociclista de General Roca resultó gravemente herida luego de chocar contra la puerta de un auto que se abrió de manera repentina mientras ella circulaba por calle San Juan. El hecho ocurrió cuando la mujer, que manejaba con casco protector, se aproximaba al cruce con calle Padre Nazario y se encontró con un vehículo estacionado a su derecha.
En ese momento, el conductor del automóvil abrió la puerta sin advertir la proximidad del tránsito. La motociclista no tuvo margen para esquivar el obstáculo y terminó impactando de lleno contra la chapa, lo que provocó su caída violenta sobre el asfalto.
El golpe le ocasionó severas lesiones en el brazo y en el hombro derecho, por las cuales debió ser intervenida quirúrgicamente. Las secuelas derivaron en una incapacidad parcial permanente, motivo por el cual inició una demanda civil al no alcanzar ningún acuerdo extrajudicial con el conductor ni con la compañía aseguradora.
En su defensa, la aseguradora intentó eximir responsabilidad argumentando que debe existir un “espacio de resguardo” entre los vehículos estacionados y los que circulan, destinado al ascenso y descenso de los ocupantes. Afirmó que la motociclista habría invadido indebidamente ese sector y buscó atribuirle la culpa del choque.
Sin embargo, el tribunal civil rechazó por completo esa postura. La sentencia consideró probado que el siniestro se generó por la apertura intempestiva de la puerta del auto mientras la mujer circulaba correctamente por la vía pública y sin infringir normas de tránsito. El fallo también desestimó la versión de la aseguradora por falta de sustento técnico y jurídico.
Las pericias médicas confirmaron una incapacidad producto de las secuelas físicas, mientras que el informe psicológico determinó un trastorno por estrés postraumático con carácter irreversible. Además, se acreditaron los daños materiales sufridos en la motocicleta.
La Justicia también observó que la aseguradora no rechazó la cobertura en tiempo y forma ni demostró que la póliza estuviera anulada antes del hecho, por lo que la consideró responsable solidaria junto al propietario del vehículo.
El fallo ordenó una indemnización que contempla daño físico, daño moral, afectaciones psicológicas y perjuicios materiales, marcando un precedente más sobre la obligación de los automovilistas de abrir las puertas del vehículo con la debida precaución para evitar siniestros.








