Policiales
Proponen crear un Programa Municipal de Seguridad Ciudadana
Un vecino de la ciudad elevó una propuesta al Concejo Deliberante donde plantea elaborar planes, programas y políticas activas en materia de seguridad pública.

Gonzalo Barbero, vecino de General Roca, presentó ante el Concejo Deliberante un proyecto para la creación de un Programa Municipal de Seguridad Ciudadana para mitigar la ola de inseguridad que aqueja a la ciudad. En diálogo con Ahí Vamos (de lunes a viernes de 7 a 9 por La Super FM 96.3) señaló la «necesidad de contar con un programa con el objetivo de elaborar planes, programas y políticas activas en materia de seguridad pública».
«El proyecto propone la creación de una partida presupuestaria destinada a la seguridad para financiar cámaras de video vigilancia, sistemas de reconocimiento automático de patente, alarmas comunitarias, construcción de puntos seguros y campañas de prevención sobre delito complejo o novedoso», detalló.
También pide al Poder Ejecutivo Municipal iniciar las conversaciones necesarias para concretar el Concejo Local de Seguridad Ciudadana dispuesto por la Ley Provincial N° 4200. «La policía no es el único actor responsable, se necesita el compromiso de todos los niveles del Estado trabajando en forma conjunta para llegar a una solución integral, es necesario que se asuma el debate para garantizar la seguridad de nuestra ciudad y este programa aporta algunas herramientas para ello», manifestó Barbero.
«No propongo que se cree una policía municipal como si existe en otras localidades, pero si diferentes mecanismos con los que puede colaborar el Municipio con la seguridad. Uno de ellos es el punto seguro o tótems de seguridad, los cuales se encontrarán conectados al centro de monitoreo de la policía. Sirven para alertar ante situaciones de peligro o riesgo y son instalados en espacios públicos de gran concurrencia. Cuenta con cámaras, botón antipánico, intercomunicador y sirenas. Los puntos seguros han dado muy buenos resultados en Vicente López y Florencio Varela», señaló Barbero.
Asimismo propone la instalación de alarmas comunitarias. «Se trata de sistemas de alerta remoto ante actitudes sospechosas o accionar delictual que tienen por objetivo potenciar y colaborar con los mecanismos de seguridad ciudadana, en pos de generar una ciudad segura y tranquila para vecinos y vecinas».
«Se complementa con señalética en lugares visibles que actúen como disuasivo del actuar delictivo. Actualmente alarmas comunitarias funcionan en Bariloche, Venado Tuerto y Zárate entre otras localidades», agregó.
Policiales
Robaron en una vivienda y fueron atrapados
Un joven de 29 años fue visto caminando con un TV y un microondas, lo que llamó la atención de los policías.

Un trabajo en conjunto entre dos unidades policiales permitió, durante la noche del martes (01/07), recuperar elementos sustraídos en un domicilio de la calle Urquiza. La colaboración entre empleados policiales permitió detener a una persona y recuperar los objetos sustraídos.
El hecho ocurrió cuando efectivos de la Comisaria 21° tomaron conocimiento que autores ignorados rompieron un portón y sustrajeron elementos de una vivienda. En ese momento, informaron desde la Subcomisaria 69° que habían detenido a un joven de 29 años que transportaba electrodomésticos sin poder acreditar propiedad.
El trabajo conjunto permitió identificar rápidamente al sospechoso y recuperar los elementos robados, un televisor Philips de 32 pulgadas y un microondas Peabody digital.
La Fiscalía de turno dispuso las medidas necesarias para que se realice un acta de reconocimiento y entrega de los elementos a la denunciante.
Policiales
Detuvieron a un hombre que tenía pedido de captura
El sujeto circulaba en un automóvil por la zona norte de la ciudad. Al ser identificado, fue detenido inmediatamente.

Un hombre fue detenido en General Roca por personal de la Comisaria 31°, mientras los efectivos realizaban tareas de prevención.
El joven de 31 años fue identificado mientras se desplazaba en un automóvil Renault 19 junto con otros dos sujetos.
Al consultar la base de datos policial, los uniformados se informaron con que el hombre tenía un pedido de captura vigente requerido por el Juzgado de Ejecución Penal Nº 10 de Roca, por lo que se procedió a su detención de manera inmediata.
La magistratura fue notificada de la detención y se realizaron las actuaciones correspondientes.
Judiciales
Cuatro policías fueron imputados por torturas cometidas contra dos adolescentes en Roca
Los hechos ocurrieron en junio del año pasado en J.J. Gómez. Los jóvenes fueron llevados a un descampado, donde fueron amenazados y golpeados.

Tras un cuarto intermedio, ayer (02/07) al mediodía se conoció la resolución del juez de Garantías interviniente y cuatro empleados policiales quedaron imputados por delitos que incluyen tortura, lesiones leves calificadas por el carácter de funcionario policial, privación ilegítima de la libertad, omisión de denunciar tortura y amenazas con armas. Además, tal lo solicitado por el Ministerio Público Fiscal, se establecieron medidas cautelares para preservar a 16 personas, entre ellas varios adolescentes.
Según la acusación fiscal, «el 15 de junio del año pasado, entre las 2.05 y las 4.30 de la madrugada, los imputados, que se movilizaban a bordo de un móvil policial tipo pick up prestando funciones en la Comisaría 47° de J.J. Gómez, arribaron a un playón deportivo del barrio Alta Barda y a partir de ahí habrían desplegado una serie de acciones contra dos adolescentes«.
«Uno de los policías habría efectuado disparos al aire para que los jóvenes que allí se encontraran se dispersaran. Luego de identificar a las dos víctimas de este legajo, el mismo empleado policial frente a sus tres compañeros, los hizo subir a los menores al móvil», describió el fiscal.
«Una de las empleadas manejaba, la otra estaba en la cajuela, y el otro se ubicó en el asiento trasero junto a los dos chicos», explicó el representante fiscal.
«Los llevaron a un descampado privándolos ilegítimamente de su libertad al no haberlos conducido a la unidad policial, y una vez allí -siempre el mismo empleado policial- les pegó, las dos mujeres policías les decían que frenara su accionar, mientras el otro hombre observaba callado«, mencionó el Ministerio Público Fiscal.
«Este hombre les siguió dando órdenes, esta vez les dijo que corrieran y volvió a efectuar detonaciones hacia los pies de los dos adolescentes, causándole a uno de ellos una herida en el muslo izquierdo producto del impacto de un perdigón», agregó el fiscal.
El accionar habría continuado con una frase que el mismo empleado policial les dijo a ambos menores: «qué pasa si yo te mato y te desaparezco?», mientras habría tenido el arma cargada.
«Todo culminó cuando los chicos pudieron escapar hacia la zona de las sierras, donde permanecieron ocultos», concluyó la acusación fiscal.
Entre la evidencia con la que se cuenta para esta instancia, el representante fiscal mencionó: las denuncias penales de las familias de ambos adolescentes, las múltiples entrevistas realizadas en sede fiscal, los certificados médicos de las víctimas. Así mismo se encuentra el parte diario de la guardia de la Unidad 47°, el informe solicitado a la Regional IIda., la identificación del vehículo involucrado, las Cámaras Gesell y los informes concretados por las profesionales del Cuerpo de Investigación Forense (CIF). La pericia del médico forense CIF respecto de las lesiones, entre otra prueba.
La defensa penal pública que asiste a dos de los imputados se opuso a la calificación legal como a las medidas cautelares, proponiendo que el hecho se enmarcara en vejaciones. Lo mismo hicieron los otros dos defensores privados de los otros empleados policiales.
Finalmente, tras la resolución del juez de Garantías interviniente hoy uno de ellos quedó imputado por ser el autor de los delitos de: «torturas en concurso ideal con lesiones leves calificadas por el carácter de funcionario policial, privación ilegal de la libertad con abuso de función y amenazas con arma».
Las dos mujeres por ser partícipes necesarias del delito de «privación ilegal de la libertad con abuso de función» y ser autoras del delito de «omisión de denunciar tortura».
El otro empleado quedó imputado como partícipe necesario de «torturas en concurso ideal con lesiones leves calificadas por el carácter de funcionario policial, privación ilegal de la libertad con abuso de función y amenazas con arma».
El plazo de investigación preliminar preparatoria y la medida cautelar de prohibición de acercamiento, de contacto a 100 metros y de hostigamiento tanto a las víctimas como a las demás personas mencionadas por la Fiscalía tiene el mismo plazo, hasta el 2 de noviembre de este año.