Política
Proponen IVA 0% para carnes y alimentos de la canasta básica
El proyecto fue presentado por el senador Weretilneck. Incluye además frutas y verduras, aceites, azúcar, harinas, huevo, leche y yerba, entre otros.

El senador nacional por Juntos Somos Río Negro, Alberto Weretilneck, presentó un proyecto de ley para llevar a 0% el impuesto al valor agregado para los diversos productos que componen la Canasta Básica Alimentaria. Será hasta el 31 de diciembre todo el país, prorrogable por seis meses. Incluye carnes, frutas y verduras, aceites, azúcar, harinas, huevo, leche y yerba, entre otros.
“El incremento del costo de la canasta básica -superior al índice de inflación- genera la necesidad imperiosa de tomar medidas para paliar el enorme costo que actualmente deben afrontar los sectores más vulnerables de la sociedad, al que además se suma un terrible e histórico contexto socioeconómico, como consecuencia de la pandemia. Esta medida procura amortiguar costos sobre el consumo de productos que son de imperiosa necesidad”, explicó.
En este sentido, propuso establecer un mecanismo de diálogo permanente con los diferentes actores para garantizar la mayor efectividad.
La carga tributaria, para quienes integran en Argentina el sector más humilde de la población, representa el 34% de su ingreso bruto, y el IVA es el principal factor. “Esto se ve reflejado en los datos de la distribución del ingreso, que consolidan una tendencia estructural en la economía argentina, donde la desigualdad económica entre ricos y pobres no ha parado de crecer hasta niveles escandalosos”, manifestó.
Weretilneck explicó que el costo fiscal estimado de su propuesta rondaría los $155.000 millones anuales, considerando los datos de recaudación del año 2020. “Evidentemente es una cifra considerable, sin embargo, no lo es si la evaluamos a la luz de la justicia distributiva que proponemos. Las exenciones siempre son justificables y válidas. La eximición del IVA a la canasta básica de alimentos es una cuestión de justicia para que aquellos sectores más vulnerables no abonen el IVA cuando compran lo elemental para sobrevivir”.
Los productos y alimentos alcanzados son: Aceite de girasol, maíz y mezcla; Arroz; Azúcar; Carnes: Asado, carnaza común, espinazo, paleta, carne picada, nalga, pollo, carne de pescado; Conservas de frutas, hortalizas y legumbres; Harina de maíz y de trigo; Huevos; Leche fluida entera o descremada con aditivos; Pan; Pan rallado y/o rebozador; Pastas secas; Yerba mate, mate cocido y té; y Yogur entero y/o descremado.
En nuestro país la evolución de la alícuota del impuesto fue creciendo con el transcurso del tiempo, y en 1995 llegó al 21% que se mantiene en la actualidad. De esta manera, la Argentina es el país con mayor porcentaje de América Latina, sólo superado por Uruguay, que aplica el 22%. En Chile y Colombia aplican un 19%, en Brasil 17%, y en Bolivia el 13%. En el resto del mundo el promedio está en el 15%, y contempla tasas más bajas para los productos básicos como alimentos y medicamentos.
Agro
Banacloy cuestionó la decisión de Nación de permitir el ingreso de asado con hueso a la Patagonia
El ministro de Desarrollo Económico y Productivo de Río Negro advirtió sobre el impacto sanitario y económico que puede generar, y reclamó al Gobierno diálogo y planificación federal.

La reciente habilitación del ingreso de asado con hueso plano a la Patagonia, dispuesta por el Gobierno nacional, continúa generando preocupación en la región. El ministro de Desarrollo Económico y Productivo de Río Negro, Carlos Banacloy, manifestó su disconformidad con la medida y criticó la ausencia de una estrategia sanitaria integral en el país. «Desde hace años venimos reclamando un plan sanitario nacional. No puede ser que, después de 24 años, aún no se haya unificado el estatus sanitario», cuestionó el funcionario, haciendo alusión a la tradicional barrera que resguardaba a la Patagonia de la fiebre aftosa.
En diálogo con Ahí Vamos (de lunes a viernes de 7 a 9 por La Super FM 96.3), Banacloy señaló que los cortes que comenzarán a arribar «son excedentes de exportación, provenientes de animales más pesados, con mayor grasa, cortes que el mercado internacional no demanda y que acá terminan vendiéndose como si fueran de alta calidad». En esa línea, subrayó que «no es cierto que el precio va a bajar» y denunció que «se trata de carne descartada que se comercializa a un valor elevado».
Además, criticó la falta de diálogo con las provincias al momento de tomar la decisión. «Se sigue actuando con centralismo, como ocurre con las rutas. No hay comunicación ni consulta previa, y recién ahora se acuerdan de Río Negro», agregó.
El ministro también relacionó la resolución con el contexto social y climático que atraviesa el país. «Se eliminan subsidios al gas en medio de una ola polar, y no es lo mismo el invierno en el norte que en la Patagonia. Las decisiones se toman sin una noción real de lo que vivimos acá», indicó. A su vez, insistió en que la provincia no se opone al comercio interno, pero sí exige igualdad en las condiciones sanitarias para todas las regiones. «Si realmente no hay riesgo, no entendemos por qué se continúa vacunando en el resto del país. Necesitamos reglas claras para todos», remarcó.
La Resolución 460/2025 del Senasa, publicada el pasado viernes (27/06), autoriza el ingreso a la Patagonia de cortes con hueso plano -como costilla, asado y esternón- provenientes de zonas consideradas libres de fiebre aftosa con vacunación. Estas carnes llegarán a una región que mantiene su estatus libre sin vacunación. Aunque el Gobierno nacional sostiene que la medida no compromete los acuerdos internacionales ni los estándares sanitarios, en Río Negro y otras provincias patagónicas persiste la preocupación por las consecuencias comerciales y sanitarias que puede acarrear esta flexibilización.
Agro
Ante el anuncio de Nación de flexibilizar la barrera sanitaria, otra vez Río Negro se manifestó en alerta por riesgo sanitario
«La sanidad no puede reducirse al precio de un corte o a decisiones de coyuntura. Es una construcción de largo plazo», indicaron desde el Gobierno provincial.

El Gobierno de Río Negro manifestó su preocupación ante la decisión del Gobierno Nacional de flexibilizar la barrera sanitaria que «durante más de dos décadas protegió el estatus diferencial de la Patagonia». En este sentido, indicaron desde el Ejecutivo que «la reciente habilitación del ingreso de carne con hueso y otros productos provenientes de zonas donde se vacuna contra la fiebre aftosa implica un retroceso que pone en riesgo la sanidad animal, el trabajo productivo y la proyección internacional de toda la región».
«Durante 22 años, la Patagonia construyó una identidad sanitaria única, libre de fiebre aftosa sin vacunación, que fue reconocida por los mercados más exigentes del mundo. Esa construcción no fue casual ni automática: es el resultado de un esfuerzo conjunto entre productores, técnicos, organismos sanitarios y gobiernos provinciales comprometidos con una política coherente, planificada y basada en evidencia científica», agregaron.
«La sanidad no puede reducirse al precio de un corte o a decisiones de coyuntura. Es una construcción de largo plazo que requiere compromiso, responsabilidad y visión estratégica. Por eso, Río Negro insiste en que la Argentina debería haber avanzado hacia un esquema nacional unificado de mayor calidad sanitaria, en lugar de comprometer la posición alcanzada por las provincias del sur», expresaron desde el Gobierno rionegrino.
«En ese sentido, la Provincia fue clara: propuso avanzar hacia una Argentina libre de fiebre aftosa sin vacunación, subiendo la barrera sanitaria hacia el norte del país, y consolidando un estatus unificado de excelencia. Esa propuesta implicaba reconocer el esfuerzo de la Patagonia y llevar al resto del país a estar a la altura de las circunstancias, en vez de poner en riesgo lo ya logrado», agregaron.
El Gobierno de Río Negro considera que «esta flexibilización pone en jaque el camino recorrido y desvaloriza una estrategia que le ha dado al país una ventaja comparativa a nivel internacional. El estatus sanitario patagónico no sólo protege la carne bovina, sino también producciones estratégicas como la ganadería ovina, la lana y la fruticultura, gracias a un ecosistema libre de enfermedades y plagas como la mosca de los frutos».
Frente a esta decisión, «el Gobierno provincial reafirma su compromiso con la defensa del trabajo, la producción y la sanidad construida por los patagónicos. No se trata de una discusión política ni comercial: se trata de proteger un diferencial estratégico que costó años sostener, y que hoy no puede ser vulnerado por medidas que priorizan la inmediatez sobre la planificación», concluyeron.
Agro
Ahora sí: Autorizaron el ingreso de carne con hueso a la Patagonia desde otras zonas del país
La medida había sido anunciada hace 3 meses pero suspendido provisoriamente tras el rechazo absoluto de gobernadores patagónicos.

A través de la publicación de la Resolución N° 460/2025, el Gobierno comunicó las nuevas condiciones sanitarias establecidas por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) para el ingreso de material reproductivo, carnes y productos cárnicos de animales susceptibles a la fiebre aftosa a zonas del país donde la infección se encuentra controlada mediante vacunación.
La medida, firmada por el presidente de SENASA, Pablo Cortese, fue publicada este viernes (27/06) en el Boletín Oficial y ya entró en vigencia. De esta manera, representa un cambio parcial respecto a la normativa vigente desde hace más de dos décadas. Permitirá únicamente el traslado de cortes con huesos planos, como el asado y el costillar, bajo estrictas condiciones sanitarias y de trazabilidad.
La resolución afecta a productores, transportistas y comercializadores de productos de origen animal en todo el país, especialmente a quienes operan entre las distintas zonas sanitarias reconocidas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
Cabe recordar que la medida había sido anunciada hace 3 meses pero, tras el reclamo de gobernadores patagónicos, el Gobierno decidió suspenderla provisoriamente por 90 días que, justamente, se cumplen este viernes.
La decisión modifica una prohibición establecida en 2002, año en que la Patagonia fue declarada zona libre de fiebre aftosa sin vacunación. Desde entonces, el ingreso de carne con hueso desde el norte de la región, incluso desde provincias con vacunación regular y reconocimiento internacional por su estatus sanitario, permanecía vedado. El nuevo esquema, sin embargo, no implica un levantamiento general de la llamada “barrera sanitaria”, sino que constituye una excepción puntual basada en criterios técnicos y sanitarios.
La decisión responde a la necesidad de actualizar los requisitos sanitarios internos tras consultas y pedidos de las provincias patagónicas, así como a los cambios en el capítulo de fiebre aftosa del Código Sanitario para los Animales Terrestres de la OMSA.
El documento señala que la Argentina mantiene cuatro zonas libres de fiebre aftosa, tres de ellas sin vacunación (Patagonia, Patagonia Norte A y Valles de Calingasta) y una con vacunación (Centro Norte y Cordón Fronterizo), todas reconocidas internacionalmente.
La resolución aclara que la actualización «no representa un impacto para el comercio internacional y el mantenimiento de los mercados con otros países o bloques vigentes, ya que dicha actualización responde a la realizada en el citado capítulo del Código Terrestre».
El alcance de la medida se limita a cortes específicos: costilla, asado y esternón, siempre que cumplan con requisitos rigurosos. Quedan excluidos los cortes con huesos largos, como el osobuco o el lomo con hueso, que seguirán prohibidos.
El producto autorizado deberá provenir de animales nacidos, criados y faenados en regiones reconocidas como libres de fiebre aftosa con vacunación. Además, solo se permitirá el ingreso de carne fresca refrigerada, sin incluir huesos de la cabeza ni de la columna, y se prohíbe el transporte de carne congelada, medias reses o animales enteros.
El protocolo sanitario exige que la carne cumpla con parámetros como la maduración, el pH, el tipo de empaque y la verificación del origen de los animales sacrificados. El traslado deberá realizarse en vehículos habilitados bajo condiciones específicas de bioseguridad, y cada envío estará sujeto a monitoreo documental, inspecciones presenciales y controles de temperatura durante el transporte. Las plantas frigoríficas interesadas en operar bajo este régimen deberán solicitar una autorización especial y cumplir con un protocolo técnico previamente validado por las autoridades sanitarias.
El destino exclusivo de la carne será el consumo interno dentro del área patagónica, sin posibilidad de que la mercadería salga nuevamente de la región.
La zona alcanzada por la disposición comprende todas las provincias ubicadas al sur del río Colorado: Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, así como el sector del partido de Patagones, en la provincia de Buenos Aires, situado al sur de ese límite natural. Esta delimitación geográfica responde a la necesidad de mantener el estatus sanitario diferencial de la Patagonia, reconocido tanto a nivel nacional como internacional.
En cuanto al material reproductivo, la resolución detalla que los embriones de bovinos y bubalinos producidos in vitro deben cumplir con las recomendaciones de la OMSA y que las hembras donantes no deben haber presentado signos clínicos de fiebre aftosa en el momento de la recolección. Además, deben haber permanecido los tres meses previos en una zona con vacunación y cumplir con requisitos de vacunación o pruebas negativas de anticuerpos.
Para el semen de rumiantes y cerdos domésticos, se exige que los donantes no hayan presentado síntomas y hayan permanecido al menos tres meses en una zona libre con vacunación, además de cumplir con requisitos de vacunación o pruebas serológicas.