Política
Emergencia Ígnea: Acuerdo con CFI por $1000 millones para El Bolsón
Contempla la asistencia a los afectados mediante un conjunto de medidas estratégicas.

El gobernador Alberto Weretilneck firmó un convenio de asistencia técnica y financiera por la emergencia ígnea con el secretario general del Consejo Federal de Inversiones (CFI), Ignacio Lamothe, por un aporte de $1.000 millones, para mitigar los efectos del incendio en El Bolsón y zonas aledañas.
Este acuerdo busca proporcionar un respaldo inmediato a las comunidades afectadas y contribuir a la recuperación económica, productiva y ambiental de la provincia.
En respuesta a esta situación crítica, el convenio establece un aporte financiero de hasta $1.000 millones por parte del CFI, destinados específicamente a la recuperación productiva y medioambiental de las áreas perjudicadas.
Los incendios registrados en la región han generado un fuerte impacto ecosistémico, económico y social, afectando más de tres mil hectáreas y ocasionando pérdidas significativas en los sectores agropecuario, industrial, forestal y turístico. Además de la destrucción de infraestructura productiva y el deterioro de los suelos, la crisis ha comprometido fuentes de trabajo, perjudicando directamente a cientos de familias que dependen de estas actividades para su sustento diario.
El gobernador Weretilneck destacó que «este acuerdo es fundamental para garantizar la asistencia inmediata a los damnificados y avanzar en la recuperación productiva y ambiental de la provincia. Nos permite actuar con rapidez y planificación, asegurando que nuestros productores y comunidades puedan reconstruir sus actividades y generar resiliencia ante futuras crisis».
En términos de financiamiento, el desembolso de los fondos se realizará en dos etapas: una primera cuota de $500 millones dentro de los cinco días hábiles posteriores a la firma del convenio, y una segunda cuota de igual monto a los quince días siguientes. Este esquema de distribución busca asegurar una respuesta rápida y eficiente, garantizando que los recursos lleguen de manera efectiva a quienes más los necesitan.
El acuerdo contempla la asistencia a los afectados mediante un conjunto de medidas estratégicas, incluyendo la reconstrucción de infraestructura predial, la provisión de pasturas para el ganado, la limpieza y rehabilitación de bosques nativos, y la implementación de programas de reforestación para mitigar los daños en el ecosistema.
También se prevé la capacitación de productores y pobladores en la prevención y manejo de incendios forestales, promoviendo una cultura de cuidado y sostenibilidad ambiental que permita reducir riesgos a futuro.
El secretario general del CFI, Ignacio Lamothe, subrayó que «desde el CFI reafirmamos nuestro compromiso con el federalismo solidario, acompañando a Río Negro en la implementación de estrategias para mitigar los efectos de esta crisis. Nuestra prioridad es fortalecer la capacidad de respuesta ante este tipo de desastres y trabajar en conjunto para impulsar soluciones sostenibles a largo plazo».
El convenio tendrá vigencia hasta el 30 de junio de 2025, estableciendo mecanismos de seguimiento y rendición de cuentas para garantizar la correcta aplicación de los fondos y la efectividad de las acciones implementadas. Asimismo, se conformará un comité de evaluación integrado por representantes del gobierno provincial y del CFI, que se encargará de monitorear el impacto de las medidas adoptadas y proponer ajustes en caso de ser necesario.
Este acuerdo representa un paso significativo en la articulación de esfuerzos entre distintos niveles de gobierno y organismos de cooperación, reafirmando la necesidad de trabajar en estrategias conjuntas que permitan no solo la recuperación de las áreas afectadas, sino también la construcción de una estructura de prevención y resiliencia que minimice los efectos de futuros desastres.
Política
Subsidio al transporte: Río Negro denuncia que Nación retiene fondos que deben llegar a la provincia
Días atrás, Weretilneck, junto a otros 22 gobernadores, acordó un proyecto de ley para reclamar al Gobierno el reparto equitativo a las provincias de los fondos del impuesto al combustible.

En 2024, el Gobierno Nacional decidió no subsidiar más el transporte de pasajeros de las provincias, excepto el del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Según la Ley N° 23.966, que regula la distribución de lo generado por los Impuestos a los Combustibles Líquidos (un impuesto que cada rionegrino paga cuando carga nafta), lo recaudado por ese tributo debe ser distribuido a las provincias para construir rutas y subsidiar el transporte público de pasajeros, entre otros destinos. Sin embargo, ese reparto no ocurre.
«En 2024, Nación debió haber enviado a las provincias un total de $55.000 millones solo en concepto de subsidio al transporte, y tampoco ha repartido los $29.000 millones que lleva recaudados este año. Nada de lo recaudado llega a Río Negro ni a otras provincias, salvo al AMBA», reclamó el gobernador Alberto Weretilneck.
Actualmente, los únicos usuarios de transporte público que cuentan con el beneficio del subsidio nacional al transporte son los del AMBA, región que recibe $74.000 millones mensuales para sostener el servicio. Esto hace posible que un usuario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires pague un pasaje de $546 para recorrer entre 12 y 27 kilómetros, frente a lo que paga un usuario de colectivo en Río Negro: alrededor de $2.000 (incluso con subsidio provincial) para distancias menores.
En 2024, Río Negro destinó más de $3.581 millones para sostener el servicio. Este año tiene comprometido destinar $4.115 millones para mitigar el costo de las tarifas, que se elevan por las distancias y el costo de los insumos. «A diferencia de Nación, Río Negro nunca dejó de asistir con fondos al transporte público, superando incluso los aportes que hasta 2023 realizaba Nación. Desde ese año, a Río Negro no llegó nada», destacó Weretilneck.
Actualmente, Río Negro subsidia a empresas de corta y larga distancia que realizan recorridos provinciales por más de $2.535 millones anuales, priorizando las de mayor demanda en las zonas Andina y Alto Valle. Y, pese a que no es competencia de la Provincia, también subsidia el transporte urbano en Cipolletti, General Roca, San Antonio Oeste, San Carlos de Bariloche, Sierra Grande, Viedma y El Bolsón por un total de $1.580 millones anuales.
Río Negro lleva adelante toda la infraestructura vial que se ejecuta en la provincia y sostiene con sus propios recursos el servicio de transporte público. Por esta razón, días atrás Weretilneck, junto a otros 22 gobernadores, acordó un proyecto de ley para reclamar al Gobierno Nacional el reparto equitativo a las provincias de los fondos del impuesto al combustible.
La iniciativa propone derogar el Fondo para el Sistema de Infraestructura del Transporte, que actualmente se financia con el impuesto al combustible, y establecer un nuevo esquema de distribución: el 43% de lo recaudado quedaría para Nación y el 57% sería distribuido entre las provincias.
Agro
Banacloy cuestionó la decisión de Nación de permitir el ingreso de asado con hueso a la Patagonia
El ministro de Desarrollo Económico y Productivo de Río Negro advirtió sobre el impacto sanitario y económico que puede generar, y reclamó al Gobierno diálogo y planificación federal.

La reciente habilitación del ingreso de asado con hueso plano a la Patagonia, dispuesta por el Gobierno nacional, continúa generando preocupación en la región. El ministro de Desarrollo Económico y Productivo de Río Negro, Carlos Banacloy, manifestó su disconformidad con la medida y criticó la ausencia de una estrategia sanitaria integral en el país. «Desde hace años venimos reclamando un plan sanitario nacional. No puede ser que, después de 24 años, aún no se haya unificado el estatus sanitario», cuestionó el funcionario, haciendo alusión a la tradicional barrera que resguardaba a la Patagonia de la fiebre aftosa.
En diálogo con Ahí Vamos (de lunes a viernes de 7 a 9 por La Super FM 96.3), Banacloy señaló que los cortes que comenzarán a arribar «son excedentes de exportación, provenientes de animales más pesados, con mayor grasa, cortes que el mercado internacional no demanda y que acá terminan vendiéndose como si fueran de alta calidad». En esa línea, subrayó que «no es cierto que el precio va a bajar» y denunció que «se trata de carne descartada que se comercializa a un valor elevado».
Además, criticó la falta de diálogo con las provincias al momento de tomar la decisión. «Se sigue actuando con centralismo, como ocurre con las rutas. No hay comunicación ni consulta previa, y recién ahora se acuerdan de Río Negro», agregó.
El ministro también relacionó la resolución con el contexto social y climático que atraviesa el país. «Se eliminan subsidios al gas en medio de una ola polar, y no es lo mismo el invierno en el norte que en la Patagonia. Las decisiones se toman sin una noción real de lo que vivimos acá», indicó. A su vez, insistió en que la provincia no se opone al comercio interno, pero sí exige igualdad en las condiciones sanitarias para todas las regiones. «Si realmente no hay riesgo, no entendemos por qué se continúa vacunando en el resto del país. Necesitamos reglas claras para todos», remarcó.
La Resolución 460/2025 del Senasa, publicada el pasado viernes (27/06), autoriza el ingreso a la Patagonia de cortes con hueso plano -como costilla, asado y esternón- provenientes de zonas consideradas libres de fiebre aftosa con vacunación. Estas carnes llegarán a una región que mantiene su estatus libre sin vacunación. Aunque el Gobierno nacional sostiene que la medida no compromete los acuerdos internacionales ni los estándares sanitarios, en Río Negro y otras provincias patagónicas persiste la preocupación por las consecuencias comerciales y sanitarias que puede acarrear esta flexibilización.
Agro
Ante el anuncio de Nación de flexibilizar la barrera sanitaria, otra vez Río Negro se manifestó en alerta por riesgo sanitario
«La sanidad no puede reducirse al precio de un corte o a decisiones de coyuntura. Es una construcción de largo plazo», indicaron desde el Gobierno provincial.

El Gobierno de Río Negro manifestó su preocupación ante la decisión del Gobierno Nacional de flexibilizar la barrera sanitaria que «durante más de dos décadas protegió el estatus diferencial de la Patagonia». En este sentido, indicaron desde el Ejecutivo que «la reciente habilitación del ingreso de carne con hueso y otros productos provenientes de zonas donde se vacuna contra la fiebre aftosa implica un retroceso que pone en riesgo la sanidad animal, el trabajo productivo y la proyección internacional de toda la región».
«Durante 22 años, la Patagonia construyó una identidad sanitaria única, libre de fiebre aftosa sin vacunación, que fue reconocida por los mercados más exigentes del mundo. Esa construcción no fue casual ni automática: es el resultado de un esfuerzo conjunto entre productores, técnicos, organismos sanitarios y gobiernos provinciales comprometidos con una política coherente, planificada y basada en evidencia científica», agregaron.
«La sanidad no puede reducirse al precio de un corte o a decisiones de coyuntura. Es una construcción de largo plazo que requiere compromiso, responsabilidad y visión estratégica. Por eso, Río Negro insiste en que la Argentina debería haber avanzado hacia un esquema nacional unificado de mayor calidad sanitaria, en lugar de comprometer la posición alcanzada por las provincias del sur», expresaron desde el Gobierno rionegrino.
«En ese sentido, la Provincia fue clara: propuso avanzar hacia una Argentina libre de fiebre aftosa sin vacunación, subiendo la barrera sanitaria hacia el norte del país, y consolidando un estatus unificado de excelencia. Esa propuesta implicaba reconocer el esfuerzo de la Patagonia y llevar al resto del país a estar a la altura de las circunstancias, en vez de poner en riesgo lo ya logrado», agregaron.
El Gobierno de Río Negro considera que «esta flexibilización pone en jaque el camino recorrido y desvaloriza una estrategia que le ha dado al país una ventaja comparativa a nivel internacional. El estatus sanitario patagónico no sólo protege la carne bovina, sino también producciones estratégicas como la ganadería ovina, la lana y la fruticultura, gracias a un ecosistema libre de enfermedades y plagas como la mosca de los frutos».
Frente a esta decisión, «el Gobierno provincial reafirma su compromiso con la defensa del trabajo, la producción y la sanidad construida por los patagónicos. No se trata de una discusión política ni comercial: se trata de proteger un diferencial estratégico que costó años sostener, y que hoy no puede ser vulnerado por medidas que priorizan la inmediatez sobre la planificación», concluyeron.