Sociedad
Coronavirus: Río Negro trabaja en aeropuertos y el puerto para su detección y control
Ante la aparición del primer caso en Argentina, el Ministerio de Salud de la Provincia puso en marcha el protocolo correspondiente en Bariloche, Viedma y San Antonio Oeste.
Ante la situación mundial en relación a COVID-19 (Coronavirus), desde el Ministerio de Salud de Río Negro se puso en marcha un protocolo para la detección temprana y control de la enfermedad en aeropuertos y puerto provincial.
La cartera sanitaria comenzó a trabajar con el personal de los aeropuertos de Viedma y San Carlos de Bariloche para brindar recomendaciones y desplegar acciones conjuntas ante la llegada de viajeros provenientes de otros países. Las acciones se replicarán en el Puerto de San Antonio Oeste.
Estas acciones tienen como objetivo generar conciencia acerca de la importancia de las medidas de prevención y los síntomas ante los cuales se debe solicitar atención.
Para todos los casos se estableció desplegar un equipo médico profesional que evalúe la situación clínica y actual de los pasajeros que lleguen en vuelos internacionales, en el caso de Bariloche, y en barcos, en el Puerto de San Antonio Este.
Asimismo, se comenzó a distribuir y colocar, en zonas de circulación de aeropuertos y puerto, material gráfico con indicaciones y recomendaciones ante la sospecha de algún caso.
Entre las acciones generales se estableció:
Realizar difusión masiva de información a pasajeros provenientes del exterior con el objeto de incentivar la consulta temprana ante la presencia de síntomas de enfermedad respiratoria aguda.
Brindar conocimiento sobre las principales medidas de prevención para todas aquellas personas que viajen a zonas con circulación del virus.
Capacitar al personal de las distintas áreas de trabajo que puedan tener relación con un caso posible.
Solicitar la colaboración a las empresas de transporte aéreo, naval y terrestre para propiciar la detección y manejo de casos.
Acciones específicas ante la sospecha de caso
Ante la sospecha de un caso se deberá informar a la autoridad sanitaria quien colocará barbijo al paciente y procederá a trasladarlo a un sitio de atención adecuado. Seguidamente, verificará si la persona cumple criterios de caso sospechoso de presentar infección por coronavirus. Determinará los contactos estrechos y relevará información de importancia para su seguimiento.
Por último, derivará al paciente a través del servicio de emergencias prehospitalarias del aeropuerto o puerto, según la jurisdicción, hacia el hospital que corresponda.
Roca
Enero termina con temperaturas cercanas a los 40°C
No obstante, desde la semana que viene se prevé una considerable baja en el termómetro y la continuidad de lluvias en la región.
La Autoridad Interjurisdiccional de las Cuencas (AIC) anticipa condiciones climáticas inestables en la región para los próximos días. No obstante, desde este miércoles (29/01) y hasta el viernes (31/01), la temperatura máxima rondaría los 40°C. Pero, desde la semana próxima se espera una considerable baja en el termómetro, incluso con la probabilidad de lluvias intermitentes.
Para hoy (29/01), la temperatura máxima alcanzaría los 40°C y desde la AIC anunciaron posibles tormentas sobre la tarde y la noche. Las ráfagas de viento podrían llegar a los 70 km/h.
El jueves (30/01), por su parte, será otro día caluroso, donde el termómetro podría superar los 41°C por la tarde. Se espera cielo mayormente nublado y precipitaciones durante la mañana. Para el viernes (31/01) la máxima llegaría a los 36°C. Se espera cielo despejado durante toda la jornada.
El fin de semana, mientras tanto, será para seguir disfrutando al aire libre. El sábado (01/02), máxima de 32°C y el domingo (02/02) de 37°C, con algunas nubes y vientos fuertes de hasta 60 km/h.
No obstante, desde el lunes (03/02), las temperaturas comenzarán a bajar ligeramente, alcanzo los 28°C y 25°C el martes (04/02). Para ambas jornadas se espera cielo nublado y probabilidad de lluvias débiles.
Roca
En Roca llovieron casi 8 mm y se registraron fuertes daños en todo el Alto Valle
En Cipolletti, calculan que llegó a 25 mm. Las consecuencias de la tormenta en esa zona fueron importantes.
Una tormenta de características severas impactó en la noche de ayer (28/01) y la madrugada del (29/01), dejando un panorama de destrucción en varias localidades del Alto Valle de Río Negro. En General Roca, la lluvia acumuló cerca de 7,9 mm en pocas horas, pero lo que sorprendió fue la virulencia con la que el fenómeno se desató. En minutos, fuertes ráfagas de viento y precipitaciones intensas generaron daños de gran magnitud, especialmente en la infraestructura ciudades como Allen, Fernández Oro y Cipolletti.
El viento, que sopló con una fuerza inesperada, provocó la voladura de techos, el derrumbe de columnas, postes y cables de media y baja tensión, dejando a varias zonas sin servicio eléctrico en Allen y Cipolletti. Además, varios árboles fueron arrancados de raíz, bloqueando calles y afectando el tránsito en distintas partes de esas localidades.
Es que en esa zona del Alto Valle se registraron precipitaciones superiores a los 25 mm. La tormenta dejó a muchas familias sin luz por varias horas. En algunos sectores, la caída de cables de alta tensión obligó a las autoridades a cortar el suministro de energía en un esfuerzo por evitar accidentes.
Se espera que, aunque las condiciones climáticas mejoren y hasta se esperan temperaturas superiores a los 41°C, el pronóstico para los próximos días sigue indicando inestabilidad para esta noche (29/01) y mañana jueves (30/01).
Roca
Crítico estado de situación tras el temporal de anoche
El saldo fue voladuras y caídas de techos, árboles que se levantaron de raíz, derrumbes de columnas, postes y cables de media y baja tensión.
Una tormenta de dimensiones pocas veces vista en el Alto Valle, al menos en el último tiempo, generó todo tipo de destrozos en instalaciones eléctricas de Cipolletti, Fernández Oro, Allen, Roca e Ingeniero Huergo. La situación es de emergencia en algunos sectores, por los destrozos que generó el temporal y por la coyuntura actual, en plena temporada de cosecha (y aumento de demanda) y con una nueva ola de calor que se avecina.
La virulencia con la que anoche cayó agua en pocos minutos, y soplaron ráfagas de viento de impactante intensidad, ocasionó voladuras y caídas de techos, árboles que se levantaron de raíz, derrumbes de columnas, postes y cables de media y baja tensión.
Según lo analizado, el fenómeno climático (una especie de tornado de pocos minutos) se localizó con fuerza y furia en las zonas de los Manzanares de Cipolletti, Ruta Nacional N° 22, Fernández Oro y Allen. La evidencia se ve en los árboles, postes, columnas tiradas en el piso, en un escenario pocas veces visto.
En Cipolletti y Fernández Oro los daños fueron de gran índole, al punto que se registró un apagón casi generalizado en muchos sectores durante la noche. A medida que el temporal amainó, las guardias operativas comenzaron a salir a la calle y empezaron a evaluar daños y se fue recuperando buena parte del suministro antes de la medianoche.
Dada la magnitud de los destrozos, desde la Gerencia de Operaciones de EdERSA se definió en horas de la madrugada reponer todo el abastecimiento troncal que estuviese en condiciones, realizando nuevas configuraciones y anillados. Ya con la luz del día, se analizan nuevas alternativas y se evalúan los daños.
En Allen la situación es aún más crítica porque las dos ternas de abastecimiento troncal se encuentran fuera de servicio y con importantes daños, literalmente en el piso. «Las redes troncales se encuentran en el suelo, y los accesos están anegados por agua, chapas tiradas, y árboles en el piso», detalló el panorama el área de Operaciones de esa ciudad. Las cuadrillas operativas lograron con mucho esfuerzo dejar en servicio la ciudad con un esquema de emergencia, dado que Allen actualmente se encuentra abastecido desde un nodo en 66 kV que hacía tiempo no se utilizaba.
Todas las cuadrillas de la distribuidora, propias y de contratistas, se encuentran trabajando en cada una de las ciudades. «La situación es realmente compleja, sobre todo en Allen, porque el daño en el sistema troncal fue muy grande», explicaron voces técnicas de EdERSA.
«La situación es de emergencia en las localidades mencionadas y lo más preocupante es que estamos en plena temporada frutícola y ante una nueva e inminente ola de calor. Por lo que le pedimos encarecidamente a los usuarios que es fundamental que hagan un uso racional de la energía», sintetizaron fuentes de la gerencia de Operaciones.